03 Jun 2020

Nota de Espiritualidad – Mayo de 2020

“Debemos pedir el amor a la Cruz” Madre Paulina Von Mallinckrodt

Sin duda más grave que la cuarentena social, comunitaria, que aislarnos de los demás, es la cuarentena individual, es aislarnos de nosotros mismos. Así sería un grave error cerrarnos a nosotros mismos, aislarnos de nuestra interioridad profunda, de nuestra espiritualidad, cerrar nuestro contacto con Dios.

En la Cruz Jesús nos mostró que tenemos que estar abiertos a un encuentro de interioridad personal siempre. Evitar aislarnos de nosotros mismos, fortalecer nuestra espiritualidad a través de la oración, de la comunión sacramental, del rezo del Rosario diario. No trasladar la cuarentena social a una cuarentena personal, aislante, que nos aleje de Dios, aun teniendo razonables justificaciones de enojo, frustración de proyectos personales, y actividades deseadas y no realizadas.

El aislamiento en una perspectiva católica no es malo en sí mismo, tiene que dar frutos espirituales, vivirlo como un camino de salvación cada uno y cada familia a su manera.

La Madre Paulina nos dejó una orientación para estos duros momentos al decirnos: “Pedir el Amor a la Cruz”. La fuente del amor es la Cruz, es el sacrificio, es la entrega total en obligaciones como Jesús se entregó. No podemos pedir el amor al facilismo, ni al egoísmo, ni a la simple materialidad de la cosas no esenciales, ni al éxito ni a la visibilidad superflua. Pedir el amor a la Cruz es no guardarse nada cuando Dios nos pide todo, y sabemos que su misericordia nos cubre. Pedir el amor a la Cruz no es sentarse a esperar un cambio externo a nosotros, es indagar en nuestra profundidad espiritual, promovernos nosotros en el modelo de Cristo para llevar una vida hacia Dios.

Pedir el amor a la Cruz es buscar ser sagrario, hacer lugar a Dios en nosotros, vivir en Jesús y que Jesús viva en nosotros, en nuestra interioridad espiritual, en familia, fortaleciendo la iglesia doméstica que es nuestro hogar. En momentos difíciles.

Tengamos presente a la Virgen de Fátima, que el pasado 13 de Mayo fue su fecha aniversario, su mensaje y virtudes de humildad y sencillez religiosa en Portugal sigue tan vigente como desde su aparición.

Comisión de Espiritualidad y Cultura