Querida Madre Paulina:

¡Qué día tan especial! ¡Qué alegría poder festejarlo juntas en el Colegio!

No pudimos hacer el picnic de todos los años en el patio ni compartir todas la Misa, pero pudimos festejar en tu día.

Rezamos por zoom, cantamos tu himno, nos vestimos con los colores de cada Casa –también las maestras!!! Y sumamos puntos!-, comimos algo rico que nos regalaron las Hermanas. ¡Fue un gran festejo!

Las chicas más grandes tuvieron misa en el patio.

Gracias Madre Paulina por este día tan especial para todos.

Le pedimos a Jesús por cada una de las Hermanas y que podamos ser cada día más parecidas a vos.

Gracias!

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